3 razones por las que la visión artificial es importante
Cuando se piensa en la salud, la seguridad y los entornos controlados en la fabricación de productos, un área de enfoque podría ser la industria de alimentación y bebidas. El objetivo es una calidad constante del producto y de su embalaje, y la visión artificial se utiliza cada vez más para lograrlo. Los sistemas de visión artificial para la inspección no solo buscan defectos, también buscan contaminantes para asegurar que los productos satisfagan los estándares definidos por las asociaciones de la industria alimentaria mundial, comprueban si hay algún defecto funcional en la estructura del embalaje y buscan múltiples irregularidades definidas en los parámetros de programación.
Las personas siguen siendo esenciales para la identificación de defectos, pero la intervención humana ha evolucionado y su papel se ha ampliado, los trabajadores ya no son meros recolectores y empaquetadores (que siguen siendo necesarios) sino también programadores y analistas de datos. La identificación de inconsistencias a gran escala ahora utiliza la automatización para lograr uniformidad a alta velocidad. Esto se hace de tres maneras:
1. Control de calidad
Los procesos de automatización del control de calidad basados en la visión pueden ayudar a separar los productos en porciones iguales. Por ejemplo, en el caso de un paquete de chicles, la máquina puede asegurarse de que haya el mismo número de chicles o pastillas en cada paquete y de que no existan disparidades.
Y no solo eso, los sistemas de visión artificial también garantizan una integridad estructural uniforme, que es tan importante para el cumplimiento de los estándares como para la venta y el marketing del producto. Para seguir con el ejemplo del chicle, cualquier diferencia en el número de unidades por paquete no solo significaría mala calidad para el cliente, sino que además afectaría a la integridad estructural de cualquier presentación de lotes.
2. No es solo una caja… es una marca
Un producto no es un objeto autónomo; se encuentra entre otros de la misma marca o del mismo tipo en un estante, como parte de una colección que tiene que ser visualmente atractiva para el consumidor, en especial si es de una marca nueva en un mercado saturado. Ya se trate de un producto diferenciado o de un producto de marca blanca (que intenta parecerse lo más posible a una marca líder), vivimos en una sociedad visual en la que una descripción o una especificación técnica han dejado de ser suficiente para convencer. Aquí es donde los sistemas de visión artificial pueden detectar defectos en tiempo real y retirar los productos que no se ajustan a las pautas de la marca para proteger su reputación de calidad. En definitiva, hace las operaciones más eficientes y reduce los desperdicios al retirar elementos a tiempo de repararlos.
3. Claridad y coherencia del etiquetado
Un mal etiquetado o simplemente la falta de información en las etiquetas de los productos pueden originar multitud de problemas, tanto desde el punto de vista y los detalles del cumplimiento de los estándares comerciales como para la seguridad del consumidor. Sin la información adecuada, los productos podrían llegar a retirarse, lo que conllevaría pérdidas financieras no solo para el fabricante, sino para toda la cadena de suministro, así como un perjuicio a la reputación de la marca tanto directa como indirectamente. Cuando se produce esta fatalidad con los productos alimenticios y las bebidas, por ejemplo, si tienen alérgenos que no están claramente identificados en los ingredientes, los peligros derivados podrían ser titulares de noticias mundiales. Por eso, los sistemas de visión artificial pueden ser cruciales para evitar esas situaciones, al comprobar cada unidad antes de que salga por la puerta de la planta de fabricación.
¿Cuál es el futuro de los sistemas de visión artificial?
Aunque aquí estamos hablando del producto, el embalaje y el etiquetado como si fueran elementos discretos, la automatización y la visión artificial ayudan a combinar estos factores para darles el mismo seguimiento integral, desde su origen hasta el estante, lo que es tan vital en la industria de alimentación y bebidas como en otros mercados.
La tecnología siempre ha sido el principal motor de las mejoras: desde mejores sensores, precisión y velocidad en los visualizadores de tramas y el pesaje/calibrado de los cables y nitidez en las cámaras, hasta actualizaciones de hardware y software o capacidad de comunicarse con otros sistemas. Los parámetros de aprendizaje automático, la comunicación entre sistemas y los avances en inteligencia artificial son ahora la tecnología que ofrece mejoras en la plena trazabilidad, el control de calidad y la automatización en la industria alimentaria y en otras.