Aeropuerto de Berlín Brandenburgo: medio millón de fallas y una maraña de cables
Es una historia de advertencia, que habla de cómo incluso los proyectos más grandes pueden salir mal. El aeropuerto de Berlín Brandenburgo se construyó como una obra maestra del moderno Berlín, una nueva terminal que no tenía connotaciones de Oriente ni Occidente, pero se suponía que era el punto de partida para que millones de viajeros exploraran la ciudad. Se suponía que debía abrirse en 2012, pero sigue en suspenso debido a un seguido de fallos.
A diferencia del aeropuerto español Cuidad Real (también conocido como Aeropuerto Fantasma de España), que en realidad se abrió y aceptó vuelos limitados durante casi 3 años, Berlín Brandenburgo ha permanecido cerrado con solo la cantidad mínima de actividad para mantenerlo.
¿Pero por qué? Cuenta con una estación de tren funcional que proporciona conexiones rápidas a la ciudad, un hotel de aeropuerto inteligente contiguo a ella (con personal mínimo para abrir los grifos de vez en cuando y evitar que caiga en un estado de deterioro total), junto con toda la funcionalidad aparente de un importante aeropuerto internacional. Los carruseles de manejo de equipaje crujen con regularidad, los tableros de información de vuelo muestran datos (aunque se extraen de un aeropuerto diferente) y la iluminación del aeródromo se instala si no se usa activamente. La razón citada por un artículo de la BBC fue una combinación de "disputas políticas, incompetencia torpe y la mayor maraña de cableado mal instalado en el mundo”.
Si bien no podemos comentar sobre las dos primeras razones, la última es algo que hemos visto con demasiada frecuencia. En este caso, no se sugiere que el cable sea deficiente o que no cumpla con los requisitos, solo que no sea adecuado para su propósito. Para Berlin Brandenburg, la lista de fallos se extendió a más de medio millón, 550.000 para ser más precisos, y afectó a todo, desde los sistemas de extinción de incendios y las puertas de alarma automatizadas, hasta las bombillas incorrectas y la energía y los datos insuficientes para respaldar las operaciones mínimas aéreas. Fue tan desastroso que el alcalde tuvo que anunciar que la gran inauguración planeada para ser presidida por la canciller Angela Merkel se cancelaba.
En total, los nuevos ingenieros del proyecto estiman la necesidad de instalar “varios cientos de kilómetros de cable nuevo” para reemplazar y compensar la instalación original. El cable de retro ajuste requiere mucho trabajo y es caro, y además requiere reparaciones extensas después de los hechos. Si están en la maraña que sugiere el artículo, esto será un desafío aún mayor al tratar de identificar la fuente y el final de cada tramo de cable. La tecnología ha avanzado, incluso desde la apertura prevista en 2012, y los sistemas deberán actualizarse, lo que podría requerir un nuevo hardware (incluidos los cables) y una actualización de software. Hay que añadir el cambio en las regulaciones y la legislación de los cables desde la instalación original: ahora se ha introducido la RCP y, si bien los cables fabricados antes del 1 de julio de 2017 son conformes por antigüedad, los ingenieros del proyecto pueden tomar la decisión de comenzar des de cero con nuevos cables que cumplan con los requisitos de energía, datos o control del edificio además de las regulaciones actuales. Puede que sea la única forma de desenredar el lío que parece haber y definitivamente saber que la demanda y el rendimiento se cumplirán una vez que la terminal finalmente vuelva a ser operativa.
El fracaso de esta debacle es doble: sí, incluso el más grande de los proyectos de obras públicas en un país famoso por su eficiencia puede verse afectado por un mal cableado, y eso subraya el valor del asesoramiento técnico de expertos para escoger los cables correctos al inicio. Los cables que se instalan de forma clara y lógica durante la primera instalación, ya sea directa o mediante contención, pueden ahorrar tiempo, dinero y muchos dolores de cabeza a lo largo del proyecto.
