Bonitos pero no tanto: la fauna que amenaza las redes eléctricas
Cuando se piensa en cual es la mayor amenaza para la red eléctrica, posiblemente lo primero que viene a la cabeza son los cyber ataques, el robo de material o los factores medioambientales. Seguramente no se le ocurriría decir que son las bonitas y suaves ardillas. La intromisión animal es el problema con el que se encuentran las redes eléctricas de todo el mundo y es probable que hagan más daño que cualquier hacker.
No son pocos los animales que pueden causar grandes daños a la red. En Kenia, un solo mono consiguió que el país entero se quedara sin electricidad. En 2013, la mayor central nuclear de agua en ebullición del mundo, Oskarshamn en el lado sueco del Mar Báltico, se vio obligada a cerrar a causa de un atasco de medusas en la estructura de captación de agua refrigerante. Justo este mes, una ardilla causó, mascando los cables, un incendio y un apagón general en la ciudad de Luverne, Minesotta.
Para que se haga una idea de la magnitud del problema, Cyber Squirrel es una web que localiza las incidencias de red eléctrica alrededor del mundo causadas por ardillas y desde 2013 han informado sobre un total de 1850 “ataques”. Aunque la web es entretenida, no es una cuestión para tomarse a risa.
Actualmente existe la añadida preocupación que el cambio climático afecte la temperatura del agua y que por tanto haya proliferación de medusas, creando más incidentes que puedan llevar a interrupciones eléctricas. Las medusas prefieren aguas más calientes y con el aumento de temperatura del mar, las proliferaciones han crecido y han causado problemas más frecuentemente. Aunque las plantas como las de Oskarshamn tienen sistemas de filtración, hay muchas cosas que pueden hacerse para combatir la abundante fauna.
Aun así, para otras fuentes de energía hay mejores noticias. Una de las formas más habituales que los animales interfieren en las redes eléctricas es mascando los cables. La autoridad ferroviaria británica (Network Rail) se encontró con este obstáculo en las líneas de trenes del Reino Unido y en Eland Cables trabajamos con ellos para desarrollar una solución que redujera la cantidad de fallos en los cables y por lo tanto redujera el número de fallos en las líneas de tren.
Nuestros expertos técnicos del Cable Lab® se enfrentaron al reto de rediseñar el Cable Contador de Ejes, para reducir los problemas con los roedores pero manteniendo la flexibilidad del cable y cumpliendo con los estándares de Network Rail y la aprobación del producto. Se consideraron materiales de revestimiento alternativos y también un trenzado de acero, pero finalmente se aplicó una capa de cinta de fibra de vidrio y el prototipo de cable fue un éxito a la hora de combatir los roedores. Aunque los cables sigan siendo mascados, la cinta protectora les impide roerlo hasta romperlos, así que los problemas causados por nuestros amigos roedores sí tienen solución.
Aunque nuestros amigos más animales pueden crear graves problemas en las redes eléctricas, usar cables de alta calidad (y la solución adecuada) pueden ayudar a reducir el problema y a mantener los trenes funcionando fluidamente.